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lunes, 1 de abril de 2013

No se cansa de sufrir: lo crucificaron catorce veces


31/03/2013 | 
 
Los católicos de Filipinas reviven las últimas horas de Jesús clavados en una cruz o flagelándose, rituales condenados por la Iglesia católica del país.

Los turistas, extranjeros y filipinos, llegan en masa a la ciudad de San Fernando, a 90 minutos en automóvil de Manila, para asistir a estas escenas sangrientas de la Pasión de Cristo bajo un sol ardiente.

En otras ciudades, hombres con la cabeza cubierta con una capucha se flagelan con trozos de bambú en los cuales han hecho nudos con cuerdas, una forma de penitencia por sus pecados, lanzando gotas de sangre sobre los espectadores que bordean las calles.
Los voluntarios para la crucifixión esperan que sus plegarias se hagan realidad. En general, se trata de la curación de un ser querido.

"Estoy acostumbrado", explica Alex Laranang, de 58 años, que fue crucificado por 14 vez. "Es como una aguja que atraviesa mi mano. Después de dos días estoy listo para volver a trabajar", explica este hombre que vende panecillos en los autobuses.

Hasta ahora siempre ha sido recompensado por sus sufrimientos, pues su mujer y sus hijos gozan de buena salud, y él se gana la vida.

Alex Laranang y los otros voluntarios hacen gestos de dolor mientras los clavos penetran en sus miembros. Cuando están en la cruz, donde permanecen algunos minutos, parecen encontrarse en un trance, con los ojos fijos en el cielo.
Al bajar de la cruz se dirigen a una carpa con servicios médicos, bajo los flashes de las cámaras fotográficas de los turistas. Dos de ellos son llevados en camillas.

Estas crucifixiones tienen lugar en la región desde hace décadas, a pesar de la desaprobación de los obispos filipinos.

"Los obispos repiten desde hace tiempo que desaprueban 'esta práctica'. Pero la gente hace votos, se sacrifican por los otros", explica el hermano Francis Lucas, responsable del servicio de prensa de los obispos filipinos.

"Debemos cargar tantas cruces en la vida. No hay ninguna necesidad de llevar una de verdad", explica.
 

El hermano Lucas lamenta que estas escenas sirvan de atracción turística. La ciudad de San Fernando hace la lista de los lugares y las horas de las manifestaciones previstas para el Viernes Santo en su sitio internet destinado a los turistas.

Filipinas es el mayor país católico de Asia. Cerca de 80 por ciento de su población afirma pertenecer a la Iglesia católica romana, una herencia del período colonial español. El divorcio y el aborto están prohibidos.

fuente:catamarcaya.com

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